Mensaje navideño o «llamadme moñas»
Llegados a esta época del año, me encuentro con la campaña navideña de una conocida cadena hotelera que nos propone reconectar con la fuente de nuestra felicidad. Para ello, basan su mensaje navideño en la palabra japonesa “ikigai”, que significa “la razón de vivir”. Hábilmente incluyen, a modo de haiku, este breve mensaje:
¿Qué le hace sonreír?
¿Qué agradece en su vida?
¿Cómo disfruta cada momento?
¿Con quién es feliz?
Su ikigai es la respuesta a todas estas
preguntas.
Reconectar con la fuente de su felicidad a
su propio ikigai es nuestra propuesta para
esta Navidad.
Llamadme “moñas”, pero este mensaje navideño me ha gustado y me ha hecho pararme a pensar y responder cada una de las preguntas, para sorprenderme de que la respuesta a todas ellas era común. Cierto es que ikigai suena menos cursi que “razón de vivir”, pero la esencia es la misma.
Como muchas veces digo: parar, pensar, escuchar, desconectar y retomar el contacto con las cosas sencillas es más que necesario. En medio de tanta rutina, tanta inmediatez, tanta violencia verbal y no verbal, es imprescindible saber que lo que importa de verdad siempre es lo mismo (y muy a menudo se nos olvida).